A un barco no se le puede hacer un corte de pelo para rejuvenecerlo, ni aplicarle inyecciones de Botox, liposucciones u otros tratamientos… Pero existen algunos trucos para darle un lavado de cara… Haciendo algunos cambios llegado el momento conseguiremos quitarle algunos años y prevenir su envejecimiento prematuro.
Mantener una apariencia juvenil:
– Renueve lo gastado: Fíjese en las lonas, plásticos transparentes, vinilos, etc… Con el sol y el tiempo adquieren un color gastado. De vez en cuando la imagen de nuestro barco mejorará notablemente tan solo cambiando la tela de unas colchonetas.
– Reemplace el verduguillo: Es la protección que se sitúa a lo largo del casco y que con el tiempo se desgasta o se despega y suele ensuciarse o deshacerse. Es fácil quitar la goma con un secador, aplicando calor para sustituirla por una nueva.
– Cuide la cubierta: Cuanto más vieja es la cubierta del barco, más se agrieta y estas grietas descubren la verdadera edad del barco. Siga las instrucciones del fabricante para el mejor mantenimiento de la cubierta según el material empleado o consulte con un profesional que productos aplicar para una adecuada conservación.
– Ojo con los productos de limpieza: El sol no es lo único que daña los materiales que vemos a simple vista. Los productos de limpieza pueden dañar también fundas, colchonetas y cubierta… Es fundamental enjuagar bien el barco tras la limpieza para minimizar el daño de los productos químicos.
–